jueves, 27 de febrero de 2014

Secuencia Didáctica: Prologando...

Autores:
Mariano Favier
Julia Arines
María Luisa Iglesias
Verónica Lombardo
Claudia Vallejos


El proyecto consiste en redactar el prólogo para la obra de teatro Romeo Y Julieta de William Shakespeare, leída y trabajada con anterioridad por los alumnos en las clases de Prácticas del Lenguaje de 3° año de ESB. Una vez terminado, el prólogo se editará en formato digital y se subirá al blog de la biblioteca del colegio, donde los estudiantes suelen intercambiar sus producciones escritas (reseñas de libros y películas, poemas, cuentos cortos, etc.).
Esta secuencia didáctica se divide en diez fases, correspondientes a diez horas distribuidas en cinco clases.
Los objetivos que impulsan este proyecto son:
  • Que los alumnos sean capaces de elaborar y expresar una apreciación crítica sobre una obra literaria.
  • Que internalicen las características del género discursivo en cuestión (el prólogo a una obra literaria).
  • Que puedan reflexionar acerca de la forma en que los textos construyen diferentes tipos de destinatarios, según su ámbito de circulación, edad de los receptores, etc.
  • Que, acorde a lo mencionado en el punto anterior, puedan producir un texto formal, escrito de manera cooperativa, y dirigido a un destinatario específico: sus propios compañeros de escuela.
  • Que utilicen la netbook como herramienta didáctica para difundir conocimientos y experiencias de lectura.

Clase 1:
En la primera fase el docente explica a los alumnos la actividad a realizar. Para ello, explicita los objetivos, da cuenta de los momentos de la secuencia didáctica, del tiempo asignado y, fundamentalmente, los motiva a ver esta experiencia como una oportunidad para comunicar a compañeros de otros cursos sus impresiones sobre la obra leída.
En la segunda fase se realiza una puesta en común donde se recuperan los aspectos estudiados de Romeo Y Julieta, a través de un esquema de contenido en el pizarrón. Algunos de los temas a consignar giran en torno a las características del género dramático, la estructura externa de la obra, los temas de la misma, el contexto de producción y sus personajes.
Finalmente, se trabaja con la lectura de un texto modelo. Para esto, el docente escoge el prólogo de alguna edición juvenil sobre una obra que los alumnos no hayan visto en clase. En esta primera instancia, sólo se les pide que, en pequeños grupos, vayan señalando los temas que se menciona en el prólogo, del mismo modo en que se conceptualizó la información acerca de Romeo Y Julieta. Como tarea para la próxima clase, se les pide que traigan del la biblioteca del colegio diferentes obras teatrales para comparar sus respectivos prólogos.


Clase 2:
En la primera fase, el docente distribuye los prólogos traídos por los alumnos (él mismo trae también algunos pertenecientes a ediciones estudiantiles, incluyendo alguno que forme parte de una edición crítica, aunque este último lo guarda para sí). Luego de que son leídos todos, se da cuenta de los aspectos formales del género: estructura, registro, empleo de tiempos verbales, uso de vocabulario específico, fórmulas de comienzo, etc. Terminada esta parte de la secuencia, el docente lee detenidamente un fragmento del prólogo que integra la edición crítica y les pide a los estudiantes que señalen las diferencias advertidas y que piensen, a partir de los ejemplos que ellos reconocieron cuál es el destinatario que ese texto construye.
La segunda fase comprende el momento de la producción del primer borrador. Para esto, se organizan grupos de no más de cuatro alumnos y se les pide que, para un buen rendimiento del tiempo, decidan quién redactará, quién consultará los materiales que el profesor recomendó utilizar (diccionarios, fichas de mecanismos de cohesión, lista de verbos declarativos, la obra literaria en cuestión), quién leerá en voz alta y formulará objeciones, etc. A lo largo de esta hora, el docente se acerca a cada grupo para orientar y responder las dudas que surjan. Finalizada la clase, se pide a los alumnos que conserven los borradores para el siguiente encuentro, puesto que son centrales para llevar a cabo el avance hacia el texto terminado y digitalizado.

Clase 3:
Se comienza por realizar un intercambio de los borradores para una revisión grupal. En un primer momento, son los propios alumnos quienes efectúan las observaciones sobre lo que se debe mejorar en cada texto. Posteriormente, el docente los ayuda a confeccionar una lista de diez preguntas que deberán aplicar a cada texto. Algunas de las preguntas son las siguientes:
  • ¿Queda clara mi intención para quien lea este prólogo?
  • Mi prólogo, ¿ayuda a que el lector se haga una idea general de la obra?
  • ¿Están presentes los temas más importantes de la obra?
  • ¿Está presente nuestra opinión o valoración?
  • Mi opinión, ¿ayudará a que alguien que no leyó la obra quiera hacerlo?
  • ¿Están bien organizados los párrafos?
  • Las oraciones, ¿son claras?
  • El título, ¿es original?
  • ¿Hay vocabulario específico?
  • El cierre del prólogo, ¿es forzado?

Una vez que los alumnos hayan aplicado estas preguntas, se inicia, ya en la segunda fase, la confección del segundo borrador, en el que se hace mayor hincapié en cuestiones como la gramática y la ortografía. Terminada la producción, el docente se lleva los textos.

Clase 4:
A partir de las dificultades encontradas en algunos textos, el docente dedicará la primera fase a reforzar el trabajo con la ortografía y la gramática a partir de una serie de ejercicios de recursos (conjugación de tiempos verbales, tildación de palabras, formas de adjetivación propias del género). Finalmente, se pedirá que elaboren una versión definitiva en la que intenten considerar todos los aspectos vistos en las etapas previas.

Clase 5:
La primera fase se dedicará a explicar brevemente las características de Calameo, la herramienta informática a utilizar para la digitalización de los prólogos. La mayoría de los alumnos conoce ya esta herramienta, de modo que varios de ellos contribuyen con aportes y sugerencias acerca de la forma más conveniente de utilizar sus opciones.
La segunda fase tiene como propósito realizar una evaluación colectiva acerca de la secuencia didáctica. Se pide a los alumnos que respondan, esta vez de manera individual, acerca de cuestiones como las que se detallan aquí:
  • ¿Sirvió la experiencia de trabajo en grupo?
  • ¿Resultó útil la utilización de varios borradores antes de hacer la versión definitiva?
  • ¿Me involucré realmente en el proyecto, participando en el grupo que me tocó?
  • Mi texto final ¿mejora las dificultades y errores que tuve en los borradores?
  • ¿Logré ser claro con mis propósitos y con el destinatario?




No hay comentarios:

Publicar un comentario